Los fondos de inversión basados en bitcoin y criptomonedas mantiene una racha positiva a pesar del creciente conflicto bélico en Medio Oriente.

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Los ingresos de capital en lo que va de 2025 alcanzaron un nuevo máximo.
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Estos fondos son especialmente elegidos por clientes institucionales y corporativos.
Una racha de diez semanas consecutivas de entradas de capital en productos de inversión en activos digitales, liderada por los fondos basados en bitcoin (BTC), alcanzó un total de 1.240 millones de dólares, elevando las entradas acumuladas en 2025 a un récord de 15.100 millones de dólares.
Este flujo constante hacia fondos de criptoactivos, preferidos por clientes institucionales y corporativos, destaca un interés sostenido a pesar de las tensiones globales, expone la firma de inversiones CoinShares.
No obstante, el ritmo de ingresos se desaceleró en la segunda mitad de la semana, influenciado, por un lado, por el feriado estadounidense del Juneteenth, que conmemora el fin de la esclavitud en 1865, y, por otro lado, por la escalada del conflicto en Medio Oriente.
Como lo reportó CriptoNoticias, el pasado 12 de junio, Israel lanzó un ataque aéreo contra Irán, al que Estados Unidos se sumó el fin de semana bombardeando tres bases nucleares iraníes, un enfrentamiento que aún persiste y genera incertidumbre en los mercados.
En este contexto, los productos de inversión en bitcoin registraron 1.100 millones de dólares en entradas por segunda semana consecutiva, incluso tras una corrección de precios.
Esta reacción sugiere que los inversionistas aprovecharon la caída para comprar, interpretando la debilidad como una oportunidad. La corrección, habitual en eventos geopolíticos como el actual conflicto, afectó a bitcoin, aún percibido por algunos como un “activo de riesgo”.
Por otro lado, los productos de inversión en ether (ETH), la criptomoneda de Ethereum, sumaron 124 millones de dólares en su novena semana consecutiva de entradas, acumulando 2.200 millones de dólares en esta racha.
Esta tendencia, la más prolongada desde mediados de 2021, refleja una confianza sólida y sostenida de los inversionistas hacia estos activos digitales.