El millonario mexicano, que destina gran parte de su portafolio a bitcoin, recomendó a sus seguidores comprar mucho en caso de una caída.
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Salinas pidió a la gente no confiar en el dinero emitido por los bancos centrales.
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Figuras como Michael Saylor y Jack Mallers celebraron el nuevo ATH de bitcoin.
El precio de bitcoin (BTC) alcanzó un nuevo máximo histórico en las últimas horas, superando los USD 122.000. Ante este hito, el empresario mexicano Ricardo Salinas Pliego aprovechó la ocasión para enviar un mensaje a sus seguidores.
«Felicidades a los que me hicieron caso cuando les dije que compraran bitcoin», escribió en una publicación. «Si baja, no olviden comprar mucho y no vender. A ver si esta vez sí me hacen caso», agregó dejando en claro que mantiene una visión positiva para la moneda.
Asimismo, el millonario, fundador de compañías como Elektra, Banco Azteca, TV Azteca y Totalplay, renovó sus críticas al sistema financiero tradicional, al afirmar que «el dinero controlado por el gobierno no es confiable». Es por eso que sostiene sus expectativas alcistas para bitcoin como alternativa.
El nuevo récord despertó entusiasmo en el ecosistema y dio pie a que Salinas, uno de los más ricos de América Latina, reiterara su respaldo total hacia la creación de Satoshi Nakamoto.
Tan solo dos semanas atrás, el magnate hizo una llamativa recomendación: «Si tienes una casa, ¿crees que esa es tu inversión? Vende la casa y compra bitcoin; o conserva la casa, saca una hipoteca, compra bitcoin y luego usa ese bitcoin para cubrir tus necesidades de gasto a medida que surjan».
Para Salinas, bitcoin representa la única vía efectiva para protegerse del empobrecimiento causado por la inflación y la manipulación del dinero fíat por parte de los gobiernos. Basa ello en factores como su oferta fija emitida de forma descentralizada y posibilidad de auto custodiar y transferir sin intermediarios.
Entre los factores que impulsan la subida de bitcoin destacan un elevado nivel de adopción institucional, con empresas como Strategy y Metaplanet ampliando sus reservas, así como la incertidumbre económica a nivel global.
Como reportó CriptoNoticias, el empresario de México reveló el mes pasado que destina el 70% de su portafolio de inversiones a BTC. Esto incluye no solo la tenencia directa del activo, sino también participaciones en empresas mineras que cotizan en bolsa y en Strategy, la firma liderada por Michael Saylor.
«El dólar estadounidense, que se supone es la moneda más fuerte, perdió el 99% de su valor en los últimos 40 años», argumentó por entonces. De acuerdo con su mirada, «todas las monedas fíat terminan en lágrimas para sus poseedores».
Salinas ha sido muy crítico con el dinero fíat y las monedas digitales de bancos centrales (CBDC), a las que ha calificado como «el invento más diabólico de la historia». Según él, estos instrumentos representan una forma de control encubierto por parte de los gobiernos.
El entusiasmo por los elevados precios de BTC también fue expresado por Michael Saylor, fundador de la empresa con más tenencias en la moneda, Strategy, quien ironizó la situación resaltando lo siguiente en una publicación: «Invierte a la baja en bitcoin si odias el dinero».
Jack Mallers, CEO de Strike, también celebró el récord y advirtió a la comunidad que la verdadera fiesta apenas comienza, mientras que Samson Mow destacó que gran parte del mundo aún no comprende la magnitud de la carrera por acumular este activo.
Así mismo, el economista Saifedean Ammous aportó su visión, destacando que bitcoin no debe compararse con activos tradicionales como acciones o bonos, sino con el dinero en efectivo a nivel global. El autor estima que estos activos seguirán perdiendo valor frente a BTC.
Aun con el entusiasmo generalizado de grandes actores del ecosistema, vale recordar que bitcoin sigue siendo un activo volátil cuyo precio, como cualquier otro, depende de la oferta y demanda.
En este sentido, más allá de las declaraciones y recomendaciones optimistas de figuras como Salinas y Saylor, resulta prudente que cada persona evalúe cuidadosamente su exposición e haga su propia investigación antes de operar, sin dejarse arrastrar por la euforia del momento.
